POEMAS DE ADÉLIA PRADO
CASAMIENTO Hay mujeres que dicen: mi marido, si quiere pescar, que pesque, pero que limpie el pescado. Yo no. A cualquier hora de la noche me levanto, ayudo a descamar, abrir, cortar y salar. Es tan bueno, nosotros solos en la cocina, de vez en cuando los codos se tropiezan, él cuenta cosas como "este fue difícil", "plateó en el aire dando coletazos" y hace el gesto con la mano. El silencio de cuando nos vimos por primera vez atraviesa la cocina como un río profundo. Por fin, el pescado en la bandeja, vamos a dormir. Cosas plateadas estallan: somos novio y novia. TANTA NOSTALGIA En el corazón del irreflexivo mal gusto la alegría palpita. Un montón de mariposas entra por la ventana provocando picazón, risas, provocando besos. ¡Nos amamos y seremos felices! ¡Ah! Mi pollera cuadriculada con mi blusa a rayas... Tengo gran éxito en la ventana fingiendo que miro el tiempo, ornada de hormigas voladoras. Papá hoy tomó un baño, quiere ponerse su camisa azul de añil, hilo...